En la barra de un bar
Y ahí voy yo entrando sola al bar, a sabiendas que tendría que esperar a mi compañía, pero después de un momento y al darme cuenta que el único lugar disponible era en LA BARRA y a la par de un desconocido, casi espero afuera, pero me ganó el reto y me senté sola y e n la barra. El primero en saludarme fue el "barman", mucho gusto "señorita", hasta la mano me extendió. Cómo seguía de valiente ordené un tarro de cerveza. No me la habían servido aún cuando el hombre a la par mía me sonrió y dirigió un hola!, y en ese momento analicé la situación. Lo que estos dos hombres ven es una mujer sola en la barra "disponible". Sin pensarlo saqué mi mayor arma, ya les conté que siempre llevó uno conmigo. Y así fue como me encontró mi compañía, sola en la barra y aislada del mundo LEYENDO.